La coca-cola es un gran remplazo si no quieres usar productos de limpieza tóxicos y llenos de químicos. Sólo tienes que verter el líquido en el inodoro y dejarlo reposar por lo menos durante una hora, a continuación con un cepillo friega la parte interna del inodoro, finalmente jala la cadena y listo: tendrás un inodoro como nuevo.